Estas en: Inicio > Politica > La Constituyente
martes, 14 de junio de 2011
La Constituyente
Por : Wilfredo Mayorga Alonzo
Olvidémonos de los artículos pétreos y de la Constitución de la República. Los reformadores están dispuestos a romper con todas las normas establecidas, con tal de seguir los lineamientos dictados desde el exterior por maestros especializados en llegar al poder por las vías constitucionales, para después sostenerse allí por más años de los que les corresponde.
Estos redentores no tienen empacho en divulgar su capricho de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente y, una vez instalada, violentar los artículos considerados como inamovibles. El pueblo ya se acostumbró a bajar la cabeza para atender “órdenes superiores” que se creían exclusivas de los regímenes militares, pero que ha puesto de moda el exgolpista Hugo Chávez desde Venezuela.
El exembajador estadounidense en la OEA, Roger Noriega, ha puesto el dedo en la llaga, al señalar una presunta confabulación en Honduras, con la intención de debilitar la democracia y arrastrar a este país hacia las turbulentas aguas del Socialismo del Siglo XXI, que es todo lo opuesto a lo que esta nación ha venido experimentando desde 1982. Su voz es una alerta tempranera para que el pueblo sepa el remolino en que podría caer con estas componendas.
El más interesado en una Constituyente, es el hijo pródigo que acaba de volver desde un lugar del Caribe, quien la promovió desde cuando manejó las arcas de la República y recibió, sin recelos, la ayuda de petrodólares en su afán de una “cuarta urna”. Este señor ha dicho repetidamente que es un liberal-socialista, con lo cual se aparta de los postulados del partido que lo llevó a la primera magistratura, y al que denigra constantemente calificándolo como “golpista”.
Lo extraño es que el nuevo mandatario de los hondureños se haya prestado a estas maquinaciones, desde la fecha en que tomó posesión y con todo y banda presidencial lo fue a despedir al aeropuerto rumbo a la República Dominicana. Ni a sus ministros y colaboradores ha consentido tanto don Porfirio como a su amigo Mel. Solo falta que este le pida criminalice a los exfuncionarios del gobierno interino y que exonere a los que tienen cuentas pendientes con la justicia, para que su capricho le sea concedido exprofesamente.
El liberosocialista aceptó el Pacto de Cartagena de buena gana, no obstante que el 1 de octubre de 2010 había dicho a un periódico hondureño que los diálogos “eran trampas para que Lobo se legitimara en el poder” y que no “podía sentarse en una mesa bajo el chantaje y la represión”. Tres días después añadía a Radio Globo que “no era posible dialogar con una pistola en la cabeza”. Todo fue que lo ordenara su padrino venezolano, y su obediencia fuese de inmediato.
Como supone el subsecretario Noriega, las conexiones de Honduras con los países de la ALBA y de Petrocaribe se reanudarán con el retorno de Zelaya Rosales. El contubernio no se puede disimular, y cuando la oposición reaccione, no habrá poder que los detenga. Batman y Robin quedarán pálidos ante las hazañas que protector y protegido proyectan para este país que se hunde en más profundas honduras.
La sombra de Chávez Frías ronda ahora en el Perú. Pero es todavía prematuro para calificar su mano peluda en esa democracia amenazada por un pasado sombrío y un futuro en penumbras.
Olvidémonos de los artículos pétreos y de la Constitución de la República. Los reformadores están dispuestos a romper con todas las normas establecidas, con tal de seguir los lineamientos dictados desde el exterior por maestros especializados en llegar al poder por las vías constitucionales, para después sostenerse allí por más años de los que les corresponde.
Estos redentores no tienen empacho en divulgar su capricho de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente y, una vez instalada, violentar los artículos considerados como inamovibles. El pueblo ya se acostumbró a bajar la cabeza para atender “órdenes superiores” que se creían exclusivas de los regímenes militares, pero que ha puesto de moda el exgolpista Hugo Chávez desde Venezuela.
El exembajador estadounidense en la OEA, Roger Noriega, ha puesto el dedo en la llaga, al señalar una presunta confabulación en Honduras, con la intención de debilitar la democracia y arrastrar a este país hacia las turbulentas aguas del Socialismo del Siglo XXI, que es todo lo opuesto a lo que esta nación ha venido experimentando desde 1982. Su voz es una alerta tempranera para que el pueblo sepa el remolino en que podría caer con estas componendas.
El más interesado en una Constituyente, es el hijo pródigo que acaba de volver desde un lugar del Caribe, quien la promovió desde cuando manejó las arcas de la República y recibió, sin recelos, la ayuda de petrodólares en su afán de una “cuarta urna”. Este señor ha dicho repetidamente que es un liberal-socialista, con lo cual se aparta de los postulados del partido que lo llevó a la primera magistratura, y al que denigra constantemente calificándolo como “golpista”.
Lo extraño es que el nuevo mandatario de los hondureños se haya prestado a estas maquinaciones, desde la fecha en que tomó posesión y con todo y banda presidencial lo fue a despedir al aeropuerto rumbo a la República Dominicana. Ni a sus ministros y colaboradores ha consentido tanto don Porfirio como a su amigo Mel. Solo falta que este le pida criminalice a los exfuncionarios del gobierno interino y que exonere a los que tienen cuentas pendientes con la justicia, para que su capricho le sea concedido exprofesamente.
El liberosocialista aceptó el Pacto de Cartagena de buena gana, no obstante que el 1 de octubre de 2010 había dicho a un periódico hondureño que los diálogos “eran trampas para que Lobo se legitimara en el poder” y que no “podía sentarse en una mesa bajo el chantaje y la represión”. Tres días después añadía a Radio Globo que “no era posible dialogar con una pistola en la cabeza”. Todo fue que lo ordenara su padrino venezolano, y su obediencia fuese de inmediato.
Como supone el subsecretario Noriega, las conexiones de Honduras con los países de la ALBA y de Petrocaribe se reanudarán con el retorno de Zelaya Rosales. El contubernio no se puede disimular, y cuando la oposición reaccione, no habrá poder que los detenga. Batman y Robin quedarán pálidos ante las hazañas que protector y protegido proyectan para este país que se hunde en más profundas honduras.
La sombra de Chávez Frías ronda ahora en el Perú. Pero es todavía prematuro para calificar su mano peluda en esa democracia amenazada por un pasado sombrío y un futuro en penumbras.
Inicio de sesión Seguir el debate
Suscribirse a los comentarios de esta entrada del blog a través de...
Suscríbase a través de correo electrónico
SuscribirseSuscribirse a los comentarios de este blog a través de...
Suscríbase a través de correo electrónico
SuscribirseComentario (1)

Ordenar por: Fecha Valuación Ultima actividad
Cargando comentarios...
Publicar un comentario nuevo
Comenta como "invitado", o inicia sesión:
Volver atrás
Connected as (Logout)
No se muestra públicamente.
Connected as (Logout)
No se muestra públicamente.
Escribiendo de forma anónima.
Comenta con tu cuenta de FACEBOOK dar click en Facebook connect e introduce tu nombre de usuario y password,luego pon tu comentario en el cuadro,luego dar click en enviar. Luego puedes sali dando click en Logout...pronto moderaré tu comentario para que aparezca en la pagina....gracias por tu comentario
Comments by IntenseDebate
Responder como invitado, o inicio de sesión:
Volver atrás
Conectado como (Cerrar sesión)
No se muestra públicamente.
Conectado como (Cerrar sesión)
No se muestra públicamente.
Escribiendo de forma anónima.
La Constituyente
2011-06-14T00:24:00-06:00
Unknown
Politica|
nano · hace 728 semanas