REDACCIÓN/Ruth Meza/Salamanca
Kevin de 22 años y Alex de 26, ambos inmigrantes originarios de Olanchito, Honduras, llegaron a México desde hace tres días, su paso por la ciudad les dejó un amargo sabor de boca.
La delincuencia y corrupción a la que se han enfrentado, los han hecho salir en cuanto antes del País, según platicaron.
El pasado viernes, Kevin y Alex llegaron a la ciudad de México, contaron que esperaban un camión de pasajeros en la Central Norte, cuando de repente fueron abordados por unos hombres que dijeron ser policías.
“No eran policías, dijeron que lo eran s, pero no, llegaron en unas camionetas negras y con ropa de civil, me subieron a una camioneta que no tenía ni logotipos, ni nada, me hicieron que me quitara hasta el pantalón y nos quitaron todo el dinero”, contó Alex.
Los inmigrantes viajaron en autobús, llegaron a Tlaxcala y a Chiapas y después viajaron en tren para llegar hasta Toluca y al Estado de México, traían aproximadamente mil 600 pesos, así como 100 dólares más que les quitaron.
“Fue el viernes 8 de abril, como a eso de las 2 de la tarde, lo puedes checar en las cámaras de la central norte de México, ahí todo mundo se dio cuenta cómo nos trataron y no hicieron nada” contó el inmigrante Hondureño.
Los afectados fueron después abandonados cerca de la estación del metro de La Raza, ya los habían dejado sin dinero.
Con ayuda de sus familiares llegaron hasta Toluca y después a Salamanca, Guanajuato, aquí se refugiaron en la casa del Migrante “San Carlos Borromeo”, fundada por Monseñor Gerardo Velásquez.
Entre los inmigrantes suramericanos que deben de pasar por México para llegar a Estados Unidos, se ha corrido la voz de que pasar por México es muy peligroso.
Por otro lado, Alfredo Chaliko, Presidente de “Grupo Mendoza de Houston”, de San José de Mendoza, en Salamanca, encargado de apoyar a la sociedad de migrantes, platicó que están concientes de que el ser inmigrante resulta cada vez más peligroso.
Fuente : a.m.com.mex
viernes, 15 de abril de 2011
