sábado, 30 de abril de 2011

Hechicería entre politiqueros

Por :Mario Berríos
Déjeme decirle, don Kilimako, que lo recuerdo de niño, cuando cruzaba por la propiedad de mis abuelos, a veces volando, otras convertido en chancho. Ahora me he metido en camisa de once varas, no ve que muchos lectores me han dicho que le consulte cosas”. ¡Jajaja!, entonces cuando pasaba por allá tenía ochocientos años, pero sigo igual. “¿No se le han caído los dos dientes del frente?” No, tú sabes que tengo buen arreglo con mi padre. En tu pueblo actualmente hay otro bueno, Eric, bien pactado y bendecido por el todopoderoso, lo tenemos hasta con BB y 3 computadoras prendidas 12 horas diarias, moderno el malinche ese.

Oiga cómo curiosean, ʽpregúntele a Kilimako cómo está el esteri-leri en la política municipalʼ, me solicitaron”. Bueno, tengo datos aquí de un líder sindical de insalubridad pública. No sólo en la necestencia se dan esas situaciones, acuérdate del que se echó el proyecto Gol a la bolsa y el bembón de tu pueblo, quienes en los ochenta —con el general que aprendió a desaparecer con brujos argentinos—, eran seguidores del naipe, no hacían humo a nadie sin consultar la baraja, astrólogos o bañarse en ruda, igual que el presi que se vestía de Merlín. En la actualidad le siguen el morenito fondista de 42 kilómetros y el diputichiquito que descalabraron de un toletazo, al primero le gusta consultar con los misquitos, matan una boa y leen en su sangre, ¡y hay más! A Pin-pon lo saló una bruja. Al fatuo de Elvin le pasó lo mismo de Mal, aunque más bien conquistó a varios, su adorada hijita consulta la guija y la tierna de él iba a que le hicieran la contra allí por el Mamachepa. ¡No hay que creer ni dejar de creer!

Aquí te paso otra, diles esta a los lectores, Chávez hasta donde se sienta tiene curas, brujería, santería cubana y shamanería venezolana, revuelta con hechizos del guilabau boliviano. Asimismo te informo, aunque Cristo también era negro, unos morenitos desaparecieron con el pisto después de las celebraciones. “Don Kilimako, ¿y se acuerda del pueblo?”. ¡Cómo olvidar esos diciembres, muchacho!, la vida del campo, las tormentas a cielo abierto y relámpagos despeñados contra las montañas, los jamos y huevos que me sedujeron y vitaminaron, la leche de burra y vaca negra que me embrujaron para siempre; no es quejarse, pero la tierra natal es imposible sacársela del corazón, y no sigo porque puedo armar un gran lío con mis poderes.

Pero vamos a otras que deseaba contarte. Hay inspectores de insalubridad pública, por cierto grandes resistentes (a pagar cuando les dan fiado, a no decir no a una cerveza, a dejar de recibir dádiva). Sobre unos que se dicen curanderos, la mayoría está en el mercado "El Rápido", se dedican al esoterismo y venden desde floricunda, mariguana y "polvos de ángel" hasta la famosa ruda. Son puestos visitados por abogados, doctores, jueces, regidores y cipotes enamorados que quieren dar el primer paso con su amor. Son buenos clientes de los que tiran el naipe. Además llegan, a veces disfrazados, representantes de futbolistas, dueños de chupaderos, entre otros. Ahí te venden al santo patrón de los chiviadores. A las madres, abuelas y cuidadoras diles que no se dejen dar té de las hijas y nietas después de las 8 PM, las duermen y de ahí las nenas vuelan, se escabullen.

Fijate que una gata de insalubridad, dependencia respública donde analizan los alimentos que venden en el mercado nacional, un día casi los intoxica. “¿Y eso Kilimako?”. Porque al comprar ingredientes para un “trabajito” se le fue la mano y hasta ahora se dan cuenta que lo hace en el mismo laboratorio, o sea en su centro de trabajo. El sahumerio le explotó como lacrimógeno y el humo los hizo vomitar, ella aduce haberlo hecho como contra a los hechizos de su jefe, pues por culpa de él ya no puede merucear, si no que solo él, y que le puso la contra porque hay lucha de espíritus, los que están a favor de él, y los en contra de ella, por eso el remedio explotó. “¡Juégale!, o sea que ahorita en Semana Santa tomaron muestras de pescado seco, sardinas, lo analizaron y le hicieron pruebas en microbiología y química, pucha, pero con estos trucos bien le meten gato ensardinado con heces bacanales y los clientes no se dan cuenta”. Escucha Mario, ese laboratorio después de años de hacer estos aromas ya está contaminado de la pereza del jefe mayor, Tengaña. ¡Casi mata a los compañeros la vieja! Oye esto otro, los seguidores de Tengaña hacen ritos en la colonia Pradera y la Municipal, donde tiene trabajando a mareros que no les caben los tatuajes, gente que llega a trabajar vestidos de mujer, que lo aman a más no poder y devengan más que empleados antiguos. Hay uno que cuando viene lo espera en el aeropuerto y sólo con él es feliz, es su de confianza y hasta su billetera le confía.

Alguien me pide consultarle cómo hacerse irresistible para su chica, es un marido de crianza, él tiene 73 y ella 22”. Mm, pon atención, primero dile que ya está más allá que de acá, de nada le vale ponerse lociones caras, ropa de chavo y levantar pesas, si hay hijos de por medio no hay células de su sangre, pero si consigue la oración de La Sucia y logra enamorarla, será irresistible para siempre, hasta va a llorar por él esa joven. “Kilimako, ¿ciertos tips para finalizar?”. Si hay brujos en la necestencia en la poli también, yerberos, tira cartas, amarres. Hay un comisionado que cuando Mal lo iba a tirar a la porra buscó brujos, por eso más bien ascendió, allí anda como cualquier tigre libre de clavos, equis roba carros en la audiencia inicial ni lo reconocieron, otro matón se viste de negro y ejecuta a plena luz, ¡pero cómo está pactado! Trata de hacerle llegar este mensaje a tu alcalde, el Bruky, ojalá y no restituya o no les pague sus prestaciones a esos pobres trabajadores que despidió malamente, violentando la ley, porque si no le vamos a mandar varios “regalitos”, sapos en su casa, hicoteas en la panza y piojillo en el cuerpo.
(Ciertos fragmentos pertenecen al libro Cuentos traviesos)
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