domingo, 14 de septiembre de 2014

Entrevista a Juan Ramon Martinez

Olanchito,Honduras

¿Cree en la reencarnación?
Como cristiano católico practicante, no creo en la reencarnación. Cuando Manuel Zelaya dijo que quería reencarnarse en un potro salvaje, corriendo por los llanos de Lepaguare, me reí mucho. Nosotros los cristianos creemos en la resurrección, que considero que es un estado de avance desde esta vida fugaz a la vida eterna, en donde en compañía con Dios, superamos las dimensiones, tiempo y espacio.
Usted se considera analista, ¿quién le atribuyó ese título?
Desde el principio, usamos entre amigos la palabra análisis. Recuerdo que cuando Adán Elvir Flores me invito a escribir en La Tribuna en 1976, me dijo que era la oportunidad de hacer análisis sobre la realidad política nacional. En la década de los ochenta, posiblemente por la infl uencia de los escritores estadounidenses, nos empezaron a llamar analistas a los que dábamos opiniones en los medios. Recuerdo que a Gautama Fonseca no le gustó inicialmente el término y una vez dijo que solo a mí me gustaba. Me siento bien con la califi cación y, como ha corrido con suerte, ahora todo el mundo la usa. Y como no es un título, sino que un ejercicio, uno no tiene que tener un título conferido por nadie para opinar y analizar sobre los asuntos de la realidad.
Tiene pinta de futbolista, ¿quiso en algún momento iniciarse en este deporte?
Cuando fui niño y adolescente lo practiqué con entusiasmo; pero sin creer que ese podría ser mi futuro. Eran los tiempos que incluso Pelé en Honduras se habría muerto de hambre. Mi padre se opuso siempre a que jugara fútbol, porque era entonces muy brusco, jugaba con adultos en los campos bananeros; y decía que me podían hacer daño.
El libro “La Biblia del Asno”, ¿lo leyó?
Una parte. Es un texto de difícil aguante para espíritus y estómagos débiles como el mío. No pasé de la parte de los insultos personales, expresiones racistas en mi contra y ofensas de improvisado psiquiatra en contra de mis coterráneos de Olanchito. Cuando vio que no podía ofendernos individualmente más, a mí y a otros colegas intelectuales como Roberto Sosa, Oscar Acosta y a políticos como a Oswaldo Ramos Soto y a Jorge Arturo Reina, creí que era una expresión masoquista seguir en su lectura.
Conoce a César Indiano, ¿lo ha tratado?
Conozco a César Indiano. Somos personas que cuando nos encontramos nos saludamos respetuosamente e intercambiamos unas pocas palabras. Tengo la impresión que es un buen escritor, valiente y decidido, amigos no… Un amigo es alguien que respeta a los otros.
Gregorio “Goyo” Canales, ¿le suena este nombre?
Por supuesto, en la vida real fue un amigo de nuestra familia, originario de El Salvador que vivió con mis padres y mis hermanos menores, hasta la guerra del 69 que le obligaron en contra de su voluntad a regresar a su país nativo. Por cariño y respeto a un hombre bueno que ni siquiera sabía leer y escribir, cuando tuve que buscar un seudónimo, escogí el suyo.
Con él escribí durante algún tiempo en El Heraldo. Adán Elvir cuyo talento total no hemos valorado todavía, descubrió que el escritor de El Heraldo, tenía el mismo estilo que el mío; y un día en broma, me empezó a llamar “Goyito”. Coincidió el descubrimiento.
¿Fiestero?
Lo normal. Y cada día menos. Las obligaciones del oficio, que como sabe es muy absorbente y la decisión tomada hace más de veinte años de no consumir ninguna bebida alcohólica, me obliga a asistir a muy pocas. Exclusivamente solo asisto a las familiares o de algunos pocos amigos entrañables. Antes asistía también a las de La Tribuna que desafortunadamente se han suspendido.
¿Alguna fiesta que recuerde?
Varias por supuesto. La que celebramos cuando nos graduamos de maestros y bachilleres en Olanchito (1960), la graduación de mi hermano José Dagoberto, la fi esta de nuestro matrimonio con Nora Midence, las bodas de mis tres hijos Juan Ramón, Elia Mercedes y Juan Fernando.

A los “chonguengues” de militares en época de Navidad o Día del Periodista, ¿ha sido invitado?
Tengo muy buenos recuerdos de una fi esta en la Fuerza Aérea en donde llegué con Adán Elvir y Orlando Henríquez.
Regalado Hernández, entonces jefe de las Fuerzas Armadas quería relacionarse con nosotros. Todo estuvo bien hasta que cerca del fi nal, Orlando Henríquez dijo que la mayoría de los delincuentes habían hecho el servicio militar.
Regalado Hernández, muy mesurado pese a la ingesta alcohólica que manejaba muy bien, respondió en forma moderada. No así otros militares que escuchaban la conversación, especialmente cuando Adán y yo, argumentábamos con mucha fuerza en contra del servicio militar. Leonel Riera Lunatti, entonces jefe de la FUSEP, se disgustó y le pidió a Regalado Hernández que le permitiera retirarse porque no quería oír que nosotros ofendiéramos a la institución armada.
Como estaba algo eufórico por el alcohol, le dije a Regalado que siendo él general, le ordenara al coronel, que se quedara. Así lo hizo. Pero Lunatti no disimulaba su disgusto, que a la distancia lo siento justifi cado.
Los asistentes de Regalado, queriendo que terminara aquella discusión que se estaba poniendo cada rato más caliente, inventaron la excusa que ya no había trago. Entonces recuerdo que insistí con Regalado que mostrara que era él quien mandaba.
Hombre educado, accedió y seguimos bebiendo. Al final, creo que nos rendimos y dejamos el lugar. Allí aprendí mucho, tuve una nueva visión de los militares y me di cuenta que algunas veces uno se excede en sus declaraciones. Afortunadamente Riera Lunatti me ha perdonado; y es actualmente mi amigo; o por lo menos, nos saludamos cuando nos encontramos, en forma educada.
Cuál es su opinión ahora de los militares. Usted antes era muy crítico.
El general Gustavo Álvarez Martínez, decía que usted era comunista y tengo entendido que el coronel Fuentes lo citó en el DIN para llamarle la atención, en una oportunidad en que su esposa llamó alarmada a Adán Elvir Flores porque creyó que lo habían secuestrado y podían desaparecerlo… He sido muy crítico de los militares en el pasado, especialmente cuando se apropiaron y ejercieron la soberanía popular. Posteriormente en la guerra de los ochenta, en que toda Centroamérica se envolvió en una confrontación abierta, exigí que Honduras no fuera instrumento de los Estados Unidos, que no participáramos en la guerra en contra de Nicaragua, que no entrenáramos a los soldados salvadoreños en el CREM; y que, mucho menos, les apoyáramos militarmente en sus choques con los guerrilleros de aquel país.
Ahora los militares merecen todo mi respeto y estoy en la disposición de respaldarlos, especialmente si se mantienen firmes en la defensa del estado de derecho, la vigencia de la Constitución y la defensa de los derechos humanos.
Cuando fue candidato presidencial por la Democracia Cristiana, ¿cuántas marcas le dio el pueblo?
Según Rodrigo Wong Arévalo el haber aceptado ser candidato presidencial fue mi mayor error. Estoy por terminar dándole la razón. Porque visto el asunto en perspectiva, no había las condiciones para obtener un buen resultado. Ve las dificultades: no había un partido detrás que estuviera contento con el candidato presidencial. Lucas Aguilera y la mayoría de los dirigentes ex sindicales y ex campesinos que se habían tomado la dirección de la Democracia Cristiana, eran más fi eles a Arturo Corrales que al candidato.
Ellos eran casi empleados suyos.
En cambio yo, no tenía ningún respaldo económico del partido. Fueron unos pocos entrañables amigos que me ayudaron económicamente y agregué a estos mis ahorros, con los cuales hice una campaña en la que busqué ir a la base. Los resultados, en comparación con los que obtuvo Felicito Ávila, fueron mucho mejores. Solo superados por los de Hernán Corrales Padilla en sus buenos momentos.
Para confi rmarlo, no perdimos ninguno de los cinco diputados que teníamos. Obtuve 27.000 marcas.
Dicen por estos lares que anduvo “liberaleando” con el maestro y licenciado Horacio Elvir Rojas,
 ¿por qué razón no se quedó con la vestimenta roja?
Mi primera opción política, al cumplir los 18 años, fue incorporarme al Partido Liberal. La búsqueda de la libertad, la lucha en contra de la dictadura y la construcción de un nuevo estado que creara las condiciones para el desarrollo nacional y el mejoramiento del bienestar del pueblo hondureño, me hicieron militar bajo esa bandera.
En 1965 me desilusionó el PL cuando mostró vacilaciones al momento de confrontar la dictadura de Osvaldo López Arellano. Con otros compañeros que me abordaron, creíamos que había llegado el momento de crear la Democracia Cristiana. En 1968, junto con trece compañeros más la creamos en Choluteca. Desde entonces ha corrido mucha agua bajo los puentes y las cosas han cambiado.
Viendo que el PDCH no tiene futuro, porque ha perdido el interés en el poder porque se han conformado con el RNP, estoy considerando volver al Partido Liberal; pero sin buscar militancia o posición alguna. Tanto por razón de edad, como porque por ofi cio debo mantenerme distante de las obediencias partidarias que hacen perder independencia en el análisis y el cuestionamiento de la realidad.

Dar Click en EL TITULO DE LA NOTICIA O EN "LEER ARTICULO COMPLETO" PARA LEER TODA LA ENTREVISTA



sábado, 13 de septiembre de 2014

Viaje de misioneros norteamericanos a Olanchito

Desde el aeropuerto hasta la casa de la misión en Olanchito, Honduras. Ese viaje fue una experiencia para decir lo menos. En su mayor parte que estábamos buscando en las montañas y arboledas que nos topamos en el camino. Una vez que llegamos a una ciudad / pueblo, si íbamos a volar otra vez, se hubiera visto como un montón de hormigas moviéndose. No hay luces de la calle ... sólo ceder e ir. La gente en bicicletas y motocicletas por todas partes. No hay límites de velocidad en absoluto!

Las casas, son diferentes de las de aquí y se mezclan. En eso, significa que usted tendrá una buena casa y luego un hogar pobre por toda la ciudad. Todos ellos tienen una cerca con alambre de púas en la parte superior para mantener a los ladrones fuera. Y entonces usted verá una casa no terminada aún. Puede tomar años para construir una casa allí. Ellos van y trabajo por un tiempo y luego comprar la tierra. Ve a trabajar y luego poner los cimientos de adobe o de bloques de cemento. A continuación, vaya trabajar un poco más y luego construir las paredes y luego el techo. Ninguna deuda. Pero se necesita un tiempo. Pensé que era interesante.

Volver a la conducción de un segundo. A pesar de no hay límites de velocidad o las luces de todo el mundo era muy consciente y cortés de los demás en el camino ya sea en bicicleta oa pie. No vi la rabia del camino en la cara de nadie como los pasamos por o como ellos nos pasaron. He aquí por qué ... el tiempo no es importante allí como aquí.

En nuestro último camino a la casa de la misión que estábamos en una montaña y la carretera estaba llena de baches por decir lo menos. ¿Qué disparado todos nosotros fue que al pasar una cascada, que en realidad fluye sobre el camino a veces, miramos hacia abajo para ver un agujero en el camino que dejó sobre el espacio justo para que el vehículo pasar.

Ahora es la casa de la misión y son recibidos por el pastor Darío. Este pastor, para mí, es el Billy Graham de Honduras. Su deseo por los perdidos a aceptar a Jesucristo es increíble. Al decir hola, nos preguntó si queríamos ir a ver a los chicos en el Arca. Estábamos cansados ​​pero listos.

Esta Arca es en realidad un centro de rehabilitación para que el Señor le dio instrucciones para construir. Es también la razón por la que vinimos. Este viaje de la misión era llevar Celebrate Recovery, un programa de recuperación centrada en Cristo, al Arca y para la iglesia del Pastor Darío. Dios vio que consumado y mucho, mucho más. Al encontrarse con los chicos en el Arca se notaba que estaban lastimando ... unos pocos realmente desintoxicación. Una maravillosa primera visita.

Ahora nuestro plan era ir al Arca cada mañana y cada noche para enseñar a unos pocos hombres a dirigir un programa de CR y de compartir nuestro testimonio con los chicos. Normalmente, un programa de CR es la adoración, lección y discusión en pequeños grupos en la lección presentada esa noche. Una vez al mes alguien da su testimonio de cómo Dios ayudó a recuperarse de decir cuestiones de drogas, alcohol, depresión, ansiedad, adicción a la comida, de control y de ira, adicción a la pornografía hasta el final a simplemente ole, pero difícil, problemas de autoestima. Bien que hicimos todo lo que cada mañana y cada noche en el Arca. Recuerde, el tiempo no es un gran problema. Podríamos pasar una o dos horas si es necesario. Y lo hicimos.

La primera morning Giving Mi Testimonio que comenzó con la adoración. Lo que era genial era que muchos de ellos sabían las canciones y cantó junto en español. Por alguna razón Dios le dijo a nuestro planificador, Marie, que tenía que dar mi testimonio de que por la mañana. Le di mi testimonio, tener que cambiar un poco como ciertas palabras eran difíciles de traducir al español, entonces la lección fue presentado por nuestro jefe de equipo Bro. Rayland. Potente, como siempre. Luego vino el llamado al altar. Se podía ver la lucha en los corazones con sólo mirarlos. Finalmente algunos vinieron y oramos por ellos. A continuación, el resto vino. Oramos por todo el grupo.

Luego nos fuimos a la ciudad para establecer el resto de la visita, que confía en mí estaba Dios ordenado. Los lugares, compartimos el mensaje de esperanza a abajo no habría ni siquiera nos dejó en la puerta aquí ... mucho menos que decir, por supuesto ... .come sucesivamente. Fuimos a las escuelas, la prisión, el orfanato, hospital y sí, una estación de televisión. Y nos dieron la bienvenida con los brazos abiertos.

Cerrada el domingo con otra reunión CR en el Arca con Bro. Rayland dando otra gran lección. Más tiempo orando con los chicos y conocerlos un poco gracias a nuestro intérprete, Maria.

Lunes por la mañana había dos hombres nuevos en el Arca. Pastor Darío había ido a pescar y cogimos dos hombres más. Uno de los que voy a decir acerca de la brevedad. El diablo había apoderado de él buena. Pero tuvimos nuestra reunión de CR y oramos sobre los hombres de nuevo. Se podía ver las bombillas de apagarse en la cabeza ahora. Ellos fueron dando cuenta de que Dios lo hizo, de hecho, los ama y nada de lo que jamás habían hecho cambiaría ese hecho.

Dar click en el titulo de la noticia para comentar con tu cuenta de Facebook,Twitter,ó e-mail..puedes usar los botones de abajo para compartir en las redes sociales
Related Posts with Thumbnails
 
Usamos cookies Google y de terceros para ayudarte en tu navegación. Si continuas navegando consideramos que aceptas el uso de cookies. OK Más información